Señor director:
El gobierno está preso de un progresismo absurdo. Esa condición le impide ver, y por lo mismo, comprender la realidad que viven los chilenos y sus necesidades. ¿Cómo se explica que presenten una indicación para que policías y fuerzas armadas tengan un trato diferenciado en el uso de la fuerza con diversidades sexuales, migrantes e indígenas?
Esta obsesión por sacar adelante ciertas agendas en lugares equivocados obedece al mismo germen identitario que se apoderó de la Convención Constitucional, y que fue fuertemente rechazado por los chilenos. La introducción categorías diferenciadas de chilenos de forma arbitraria —incluso para combatir el principal flagelo de los chilenos, como lo son el crimen y la violencia— lo único que logra, a fin de cuentas, es seguir sembrando injusticia.
Cristián Stewart es Director ejecutivo IdeaPaís de y Magdalena Vergara es Directora de estudios IdeaPaís. Carta publicada en La Segunda, el 6 de marzo.